Hace 264 años, nació en Inglaterra un hombre muy especial. Su nombre es William Carey y es conocido como el "padre de las misiones modernas".
El mayor de cinco hijos, sus padres eran tejedores. Carey empezó a trabajar para el zapatero local, Thomas Old, durante cuyo tiempo aprendió hebreo, italiano, holandés y francés. Solía ??leer mientras zapateaba.
Carey se casó con la cuñada de Old, Dorothy Plackett, con quien tuvo siete hijos. Lamentablemente, tres de sus hijos murieron antes de cumplir cinco años.
Inspirado por el relato de la vida del reverendo David Brainerd de Jonathan Edwards, Carey pasó 41 años en la India como misionero sin permiso.
Condujo a 700 almas a Cristo en una nación de millones de habitantes.
Romanos 10:15 dice: "¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian el evangelio!" Escribió un libro titulado "Una investigación sobre las obligaciones de los cristianos de usar medios para la conversión de los paganos", que condujo a la fundación de la Sociedad Misionera Bautista.
Carey era conocido por decir: "Espera grandes cosas de Dios; intenta grandes cosas para Dios". También dijo: "Para conocer la voluntad de Dios, necesitamos una Biblia y un mapa abiertos". Comprendía la importancia tanto de las Escrituras como de comprender el mundo que nos rodea.
Finalmente, priorizó el trabajo significativo. Dijo: "No le temo al fracaso; me da miedo tener éxito en cosas que no importan".
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